En busca de identidad cultural

ALUMNI LISZTIANI: muchos egresados de la Escuela Superior de Música son miembros de la nueva Organización Música Iberoamericana


En un mundo cada vez más pequeño y abarcable se deciden cada vez más jóvenes músicos por la experiencia de estudiar en el extranjero. Lejos quedó el romanticismo de los viajes a Italia realizados por la mayoría de los artistas europeos de los siglos XVIII y XIX, como Goethe. El sueño nostálgico de descubrir lo desconocido ha perdido en la era del internet y de los vuelos baratos gran parte de su poesía. Las distancias son superadas cada vez más rápido; imágenes de todo el mundo nos bombardean diariamente a través de todos los medios de comunicación. Lo ajeno ya no parece ser tan ajeno, y justamente por la pregunta sobre nuestra identidad cultural va haciéndose cada vez más importante.

Justamente músicos de formación clásica pueden difícilmente evitar este cuestionamiento: Dónde queda la identidad cultural de un español o de un latinoamericano que se ha dedicado durante años a estudiar sobre todo la música de compositores alemanes, franceses y rusos? Dónde se encuentra la propia identidad (musical)? Cuestiones que uno se pregunta frecuentemente cuando vive en un país extranjero.

La organización sin fines de lucro Música Iberoamericana, fundada en Weimar en Julio de 2007 se ha propuesto difundir la música clásica iberoamericana de los siglos XX y XXI. Iberoamérica forma aquí un territorio musical de ninguna manera homogéneo: Estamos hablando de la enorme diversidad musical de los países latinoamericanos y de la Península Ibérica, la cual tiene sus raíces en las diferentes culturas originarias y en los rasgos comunes del pasado colonial. La Organización Música Iberoamericana tiene como objetivo indagar en estas similitudes, diferencias e interacciones. [...] Un proyecto central de la organización es la creación del Ensemble Iberoamericano, la única orquesta de cámara del mundo dedicada exclusivamente a la interpretación de música clásica iberoamericana de los siglos XX y XXI.

Fuente: Resonanz 2 (2008), por Ina Knoth

Traducciones del alemán por Daniela Fugellie